Hace un tiempo el Gobierno anuncio la eliminación de la desgravación fiscal por la compra de una vivienda a partir del mes de enero de 2011.
Según un informe realizado, esta medida podría afectar tanto el ajuste de los precios y hasta moderar su caída durante los próximos 19 meses, si se reactiva la demanda en los meses previos a la desaparición de esta desgravación.
Se calcula que para una vivienda de entre 200.000 y 300.000 euros, la actual deducción del IRPF representa el 10% del precio, con o cual si el mercado funciona, este porcentaje es lo que debería abaratarse este tipo de casas al desaparecer la ayuda.
A partir de enero del 2011, la deducción del 15% se mantendrá para rentas inferiores a 17.000 euros, lo que representa al 56,60% de los declarantes del IRPF, y se reducirá gradualmente, hasta desaparecer para las superiores a 24.000 euros.
El dilema radica para aquellas personas que estén pensando comprar una vivienda, y posean una renta menor a los 24.000 euros ya que deberá decidir entre comprar hoy a un precio más alto y mantener las deducciones de la hipoteca, o esperar hasta 2011 y comprar a un precio que podría ser más bajo por la eliminación de las deducciones fiscales.
Hay que tener en cuenta que en los próximos meses, la rebaja de tipos de interés y la caída de los precios va a favorecer la accesibilidad de la vivienda. Aunque según los analistas en el 2011 se darán mejores condiciones de accesibilidad a la vivienda en España de los últimos 20 años.